![]() |
Foto: Issara Willenskomer |
Por las mañanas cuando me levanto, últimamente me da por imaginar nuevas experiencias, esas de las cuales ahora me encuentro lejana pero que sin duda en algún momento encontraré, me gusta verme al espejo, porque no me ocupo de detalles, veo la verdadera persona que soy, me emociona.
La música suena mejor, he podido atender las palabras que ellas expresan, sin adjudicarles nombres o experiencias... He reído, he reído mucho las últimas tardes, conociendo a nuevas personas, evitando la ilusión, cuando irónicamente esa es mi esencia: ser ilusa.
Hoy estuve a punto de un encuentro del destino, sentí el escalofrío helado de la realidad...huí. Lo hice porque no considero necesario encontrarme con las mentiras de ayer, ya no hacen falta, tuve miedo creo que demasiado y después de aquello todo parecen coincidencias caprichosas del mañana. No lo tomaré en serio, me siento libre y feliz, por supuesto no pretendo apostar mi bienestar justo ahora.
Todo se acomoda en cierto momento, no negaré que hay instantes extraños en mi cabeza que rondan en el momento más peligroso, justo cuando permito que mi vulnerabilidad se muestre al sol, pero tenemos un millón de razones para lanzarnos al precipicio una vez mas y encontrar novedosos espacios para desarrollar esas increíble manías.
El tiempo se termina, no puedo distraerme ni un minuto mas.
El tiempo a favor o contra el mismo tiempo. Ojalá el reloj diera marcha atrás a su necedad de seguir adelante.
ResponderEliminarUn saludo
Para todo hay un momento ideal, todo lo que se hace por la fuerza, sale mal. Es la divina gracia del destino.
EliminarUn gusto leerte nuevamente. Saludos de regreso :)