Ir al contenido principal

Diccionario para dos.

Foto: Allef Vinicius
No quiero ser el clavo que saque a otro clavo, quiero ser única, quiero tener mi propio espacio en tu corazón. Estoy luchando por tener mi propio latido en tu ser, que cuando me mires e imagines todo a mi lado, tengo el sueño enorme de tomarnos de la mano y mirar nuestros grandes y diferentes sueños  unidos en un mismo hilo. 


No quiero ser tu medicina para olvidar a alguien más, quiero mi propia historia. 

Debe ser triste esperar ser la continuación de un desenlace entre miedo e intriga porque no pienso regalar mis virtudes a  quién no logro erizarle la piel, no imagino encajarle mis defectos a un ser humano que no se encuentre feliz de haberlos detectado.

Me encuentro atrapada en esa idea romántica de crear nuestras propias memorias además de inventar colores y frases que escondan nuestros secretos. No busco que seas perfecto, porque alguna vez lo intenté  y fue un fracaso total. 

Ocúpate de ti, ocúpate del tiempo que puedes compartirme, quiero ser tu pensamiento por las mañanas y tus recuerdos antes de dormir. No busco borrar huellas ni sustituir aromas o palabras, quiero mi propio diccionario para dos.

Foto: Dmitry Ratushny
Si me dejas compartir mi cielo, podremos alinear las estrellas a nuestro favor, no quiero robar tu esencia mucho menos tu personalidad, quiero que defiendas nuestro suelo como defenderías a la vida o tu libertad. Ser sólo tú y yo a momentos y permitir que se nos unan aquellos que nos amen por igual, que respetes todo lo que he construido para ofrecerte hoy.

Ojalá la vida nos una, ojalá el tiempo nos permita sobrevivir con inmensa fuerza ante cualquier adversidad, sólo no me sueltes.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Una carta sin entregar

Foto: Álvaro Serrano Estoy escribiendo esto aun cuando ni siquiera estoy segura de llegar a enviarlo… Cerré todo camino posible para no regresara la historia inconclusa que compartíamos. Sin duda, a diferencia de hace algunos años, esta historia no tendrá una segunda parte en la que todo logre funcionar maravillosamente por un tiempo. Sinceramente, hoy no tengo idea cuanto duro -en realidad- la anterior. Me quedé con un puño de dudas sobre la veracidad de lo construido. Aunque... hoy ya no importa. Pensé en ignorarte, en idealizar que por fin puse punto final a algo que no hacía más que atormentarme en las mañanas al despertar. Mi corazón se siente muy tranquilo, tengo deseos infinitos de ser feliz pues atrevidamente aseguraría que lo seré inclusive más de lo que fui contigo. Hoy he aprendido muchas lecciones y deseo aplicarlas con la persona que llegue a mi camino. Y aun si esto no sucediera, pretendo amarme y ser feliz con lo que soy.  No pienso en que tú te si...

Un nuevo comienzo

Ya he aprendido que las palabras se derriban con los actos, que hay lágrimas que no se sienten, q ue hay recuerdos vergonzosos, recuerdos compartidos que nadie jamás podría borrar. Ya entendí que el tiempo es sincero, certero, no perdona ni da prórrogas ante las dudas o el miedo. Por fin comprendo que el amor se lleva todo, que lo transforma y que las anécdotas se guardan en el corazón para herirte de a poco en los momentos menos pensados. Ya razoné que un final te permite comenzar de nuevo, desde cero, desde nada como te atreviste al inicio aunque hoy la edad te asuste; robando el valor que un día te empujó a ser feliz cuando todo suena a estar en riesgo, así es la vida... Temeraria. Mi corazón es una esponja, a punto de reventar por tantas tormentas, debido a las palabras huecas, frases inconclusas, nubes siniestras. Hoy te pido: Exprímelo hasta dar lugar a esta nueva aventura, toma mi mano y lléname de sonrisas, llévame al cielo bailando hasta llegar a la luna, dame tu ju...

Enamorarte de mí.

Me gusta el fuego en tus ojos el frío en tus manos el silencio en tus labios. Me gusta el reflejo de mis pupilas en tu mirada dorada me gusta el aroma que desprendes al despertar. ¿Cómo es que podrías enamorarte de mí? ¿Cómo es que el tiempo fue tan corto que la vida y la lejanía, entre tanta gente, nos eligió para ser uno solo? ¿Qué hice para merecer el cielo en la tierra junto a ti? ¿Qué hice para que la distancia se acortará a centímetros y mis manos pudieran rodear tu cuello? Dulce contacto que dispara mi esencia cuando te encuentras cerca, tiempo y ganas, ganas de verte acostado junto a mí por las tardes de domingo. Frío tenue que se cuela por la orillita de tus labios mientras sonríes, vida alegre, risas y llantos que aclaman nuestra historia, nuestro encanto. El chocolate dispersado en pecas por encima de tu cuerpo, piel blanca que juega a engañarme sonrojada, tersa y amable que me permite tocarla por más intenso que sea el encuentro tus manos, dedos del...